Raymond Arthur Palmer (1910-1977) fue atropellado a los siete años por un camión de la leche que le destrozó la columna. La operación a que fue sometido le terminó dejando lisiado de por vida (enano y jorobado).
La aparición del
pulp de Hugo Gernsback
Amazing Stories (1926), primera revista consagrada a la ciencia-ficción, le convirtió automáticamente en fan del género. Junto a Walter Dennis impulsó el Club de Correspondencia de la Ciencia (1929) [1], cuya revista oficial,
The Comet (1930), es considerada el primer
fanzine [2].
1930 vio también el debut literario profesional de Ray, al conseguir que la revista de Gernsback Wonder Stories #1 aceptara publicar The time ray of Jandra, una historia sobre un mundo perdido en el que se ofrecen sacrificios a un hambriento tiranosaurio, y que había escrito cinco años antes como un trabajo escolar [3].
No pude evitar bajarme ese seminal número del pulp de Gernsback, que me tenía reservada más sorpresas, obligándome a acudir del relato de Palmer a la portadilla interior para confirmar las fechas, ya que parece que nuestro protagonista tenía también el don de la profecía, incluso de forma más acusada a como la atribuía a otros escritores de ci-fi [4]. Así comienza el segundo párrafo de The time ray of Jandra:
“En 1944, cuando la Segunda Guerra Mundial estalló, me embarqué como segundo de a bordo en el buque de vapor Merida, con destino a Luanda, Angola, en la costa suroeste de África… [5]” (traducción propia)
En 1938, Ziff-Davis adquiere
Amazing Stories y, por recomendación del escritor Ralph Milne Farley [6], le ofrece el puesto de editor a Palmer. Además de publicar la obra de
E.R.Burroughs, en 1939 Palmer editó el debut de Isaac Assimov y lanza una nueva revista,
Fantastic Adventures.
En 1945 publica en
Fantastic Adventures, bajo el pseudónimo de J.W.Pelkie, el primer relato de la serie del tarzánido
Toka, al que dio el sugerente título
King of the dinosaurs y que ilustró el insigne
James Allen St.John en portada y Seward en el interior. El argumento es de lo más delirante: los hombres de las cavernas se tropiezan con dinosaurios inteligentes que… ¡les usan como pelotas para jugar al béisbol!
King of dinosaurs (Seward)
King of dinosaurs se publicó también como novela independiente, ese mismo año. Le seguirán Toka and the man bats (1946) y Toka fights the big cats (1947) en la misma revista y, en Planet Stories, In the sphere of time (1948), ilustrado por el especialista en Conan [7] Vincent Napoli (1907-81).
In the sphere of time (Napoli)
En 1948, Palmer fundó la revista Fate, especializada en fenómenos paranormales. Os dejamos con algunas de sus sugerentes portadas.
-----
[1] Su objeto era unir a los pequeños clubs locales de aficionados a la ciencia en una organización nacional y se le tiene como punto de partida del fandom.
[2] Palmer participó también en The Time Traveler (1932), de Julius Schwartz y Mort Weisinger. Ese mismo año, Schwart y Weisinger lanzan Science Fiction Digest, y Joe Shuster y Jerry Siegel Science Fiction, en cuyo nº3 (1933) publican Reign of the Superman, que entonces era un villano tipo Lex Luthor.
[3] Toronto, Richard: War over Lemuria. Richard Shaver, Ray Palmer and the strangest chapter of 1940s science fiction, 2013, McFarlane & Co.
[4] “Ray creía que la ciencia-ficción tenía la capacidad de prever el futuro de la humanidad. También creía que Amazing Stories estaba liderando el camino, y la Segunda Guerra Mundial fue su primera gran oportunidad de demostrar la habilidad profética de la CF. Cuando los japoneses bombardearon Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941, Rap inmediatamente unió los puntos:
‘Docenas de escritores han augurado este ataque. Pero ninguno de ellos osó soñar con su perfidia. En esto vemos lo auténticamente horrible de la vergüenza con que se han tropezado los japos. Una vergüenza que ni siquiera los escritores de ci-fi serán capaces de borrar. Ni siquiera imaginar…’
De Pearl Harbor al día de la victoria sobre Japón, Rap atacó al enemigo frontalmente desde el cuartel general de Ziff-Davis en Chicago. Amazing ofrecía historias bélicas desde 1940, cuando Alfred R.Steber estableció su punto de vista sobre los japoneses en el número de julio. Destruyó la isla entera de Japón (sic) en ‘When the worlds make war’. En el mismo número ‘Adam Link rights a war’ de Eando Binder se centraba en una invasión japonesa y Robert Moore Williams escribió ‘Fifth column of Mars’.”
Toronto, R.: Ibidem. (Traducción propia)
[5] Ignoramos si en la versión escolar de 1925 se incluía también este párrafo, lo que añadiría aún mayor valor a esa profecía. En todo caso, cabe destacar que, aunque la Guerra –en la que África fue un importante escenario- comenzó en septiembre de 1939, USA no entró a formar parte del conflicto hasta el ataque a Pearl Harbor, de modo que Palmer no sólo previó la contienda sino que lo hizo con un margen de error de menos de tres años. Y lo hizo como introducción a un relato sobre un viaje en el tiempo en que el protagonista pierde un puñado de años de su vida, casi los mismos que esperan al lector desde la publicación del relato hasta esa fatídica fecha… ¡Rap hizo un auténtico viaje en el tiempo!
[6] Nacido Roger Sherman Hoar (1887-1963), es autor de la saga venusiana The Radio Man (1924, en Argosy), en la que no faltan los dinosaurios.
[7] Comenzó con la novela por entregas The hour of the dragon (1935-1936) y en 1977 se encargó junto a Harold S.Delay y Hugh Rankin de ilustrar Red mails, el relato en que Conan se enfrenta a un dinosaurio.