El eslabón perdido es un estudiante de agrónomos llamado Alberto
Esta semana podría haberse encontrado un nuevo dato a favor de la teoría de la evolución de las especies, que formuló Charles Darwin hace dos siglos. Hasta ahora, el principal escollo de biólogos y paleontólogos era dar con el llamado “eslabón perdido”, un ejemplar que representara de manera contundente el paso de los homínidos al homo sapiens. Finalmente han dado con él, se llama Alberto y estudia Ingeniería Agrónoma en la UPC.
A Alberto el descubrimiento le ha cogido por sorpresa: “No me molesta que digan que soy el eslabón de lo que sea. Pero de perdido nada, que estoy en Facebook y es fácil dar conmigo porque siempre estoy de cañas en el bar de la uni y aquí todo el mundo me conoce”.
Desde que dieran con él, diversos expertos siguen a Alberto día y noche y, de hecho, será presentado al resto de la comunidad científica de aquí a dos semanas en Nueva York. “Me da igual porque no me coincide con los exámenes; además, eso de ir a Nueva York me hace un poco de ilusión”, explica. “Lo único que me fastidia es que siempre me están siguiendo unos tipos apuntando lo que hago, mirándome la dentadura y preguntándome si soy cazador o recolector”.
Alberto podría estar vinculado a la "cultura de urnas".
El hecho de que muchos piensen que Alberto pertenece a un nivel evolutivo inferior al del homo sapiens no parece preocuparle. De hecho, según él eso explicaría por qué le está costando tanto pasar de segundo de agrónomos. “Quizá pueda buscarme un trabajo acorde a mi condición y cobrar una pensión por minusvalía”, explica. “La noticia tampoco sorprenderá a mi ex o a mi madre, que siempre dice que mi habitación parece una jungla del jurásico con olores del jurásico”.
Pese al escepticismo o apatía de Alberto (se pasa el día gastando bromas a los paleontólogos que le acompañan y mordiéndoles “por hacer la gracia”), los científicos no pueden disimular su entusiasmo. “Estudia agrónomos, lo que nos hace pensar que ya ha descubierto la agricultura. Por otro lado, se desplaza cada día en tren hacia su facultad y eso indica que podría ser nómada”, explica uno de los paleontólogos. No obstante, los expertos aclaran que Alberto no habría abandonado del todo sus métodos de cazador “habida cuenta de cómo busca pareja los fines de semana”. En todo caso, están ansiosos por finalizar la investigación para dejar de estudiar a Alberto tan de cerca, dado que el dato más concluyente que han podido extraer es que “el eslabón perdido es un poquito gilipollas”.
